Ansiedad post COVID: ¿Una nueva pandemia?
La pandemia del Covid ha cambiado la forma en que las personas socializan, y esto ha tenido un gran impacto en los más jóvenes. En este sector de la población se han disparado los casos de ansiedad y depresión debido al estrés generado por la preocupación y el confinamiento del año 2020.
Como se planteó en el segundo Congreso Nacional Covid-19 que se celebró el 16 de abril 2021, se puede decir que el síndrome post Covid puede ser una nueva pandemia. Nuestra salud mental se ha visto afectada por el impacto que ha tenido en nuestras vidas el confinamiento, el miedo a la enfermedad, el número de víctimas mortales en todo el mundo y la incertidumbre de poder recuperar la normalidad.
El COVID19 ha influido en un aumento de las alteraciones psiquiátricas como son la alteración del sueño, estrés postraumático, depresión, agorafobia, trastorno obsesivo y crisis de ansiedad.
Esto nos pone en alerta ya que, según los estudios epidemiológicos, no sólo la ansiedad post COVID la padecen los infectados con el virus, sino que afecta a la sociedad en general. Las consultas de atención primaria y de salud mental se han incrementado muchísimo, demandando atención psicológica para los problemas de ansiedad.
Ante esta nueva situación de vulnerabilidad, los expertos recomiendan estar atentos ante cualquier indicio de sufrir ansiedad u otro trastorno psiquiátrico que pueda afectar a la salud.
El estrés, la preocupación, tristeza y ansiedad han aumentado durante la pandemia, especialmente en personas que se han sido infectado con el virus o han tenido un familiar enfermo. En estas situaciones se dan una serie de recomendaciones para poder hacerle frente a estas consecuencias del COVID.
Ahora que la vacunación avanza y las restricciones han bajado, es posible volver a tener contacto con familiares y amigos. La compañía de seres queridos ayuda a mejorar el estado de ánimo y es una forma de enfocarnos en otras cosas y poder disfrutar de la compañía de nuestros seres queridos.
El volver a tener contacto social es una de las recomendaciones habituales, aunque siempre siguiendo normas sanitarias para evitar cualquier contagio.
Uno de los factores que pueden generar mayor estrés y derivar en la ansiedad es estar pendiente en todo momento de los informativos. En estos medios se hace mucha referencia a nuevos brotes del virus y recuento de cifras que pueden desbordarnos.
Despejar la mente. Realizar actividades de ocio, contacto con la naturaleza, lectura. De esta manera se podrá tener un espacio de tranquilidad y dar espacio a la relajación.
Los ejercicios de respiración pausada, la meditación y los estiramientos son muy importantes para poder hacerle frente a la ansiedad y al estrés.
Ejercicios como el yoga o pilates ayudan a mejorar el estado psicológico de las personas.
Una buena rutina puede ser la clave para enfrentar la ansiedad y el estrés post COVID. Actividades como salir a correr o a caminar por el parque, salir en bici, practicar natación, puede ser muy útil para relajarse.
Como también cuidar nuestra alimentación y rutinas del sueño.
Si a pesar de todas estas recomendaciones, no conseguimos controlar la ansiedad, será el momento de pedir ayuda psicológica profesional.
PSICÓLOGA